17.3.10

Volver la libertad una disciplina.

Consumar la felicidad es un ejercicio de todos los días.
Corazón y mente deben de volverlo un hábito.

Respirar...
Oxigenarse...
Convertirse en aire...

Y va de nuevo!

Me siento como una piedra
que se lanza y golpea contra una pared
y rebota.

Y hay mucha más calma de pronto....

Ordenar todo

Cumplir con los deadlines

Buscar adentro

Encontrar la paz